Créeme, NO quieres que desee hacerte de él.

Hace como dos semanas, le juré a ladywolvesbayne, en el comentario que hice en su post sobre un libro que reseñó, que iba a hablar sobre esto. ¡Porque estoy hasta la coronilla! De que varias de las novelas “románticas” (y sí, se merece las enormes comillas) de este tiempo IDEALICEN las relaciones violentas.

Pero así como hay personas que pueden escribir sinopsis del tipo: “Caín es un hombre que siempre consigue lo que quiere. Y lo que quiere es que ella sea suya.” y pensar que es la mar de romántico y ¡Oh, hot! Y no que puede aludir a una violación. También hay personas como sara_f_black que escriben lo que realmente pasa cuando te encuentras y tienes una relación con personas que quieren hacerte suya.

LEAN, para que vean que una persona violenta sabe cómo atraer antes de golpear, y cómo lograr que la mujer se quede con él aunque la dañe.

Título: Mi mundo es él.

Autora: Sara_f_black.

Tipo: Realismo.

Extensión: 2485 palabras.

Parte de: Historias de Nuestros Mundos, Esciam Ediciones.

 

(CLICK para bajar Antología por mi aniversario de LJ, ¡7 geniales historias!)

«Él. Mi mundo es él. Ya no es el mundo que quiero, pero es todo lo que tengo. ¿Qué haces cuando el sueño se vuelve pesadilla y es imposible despertar?».

Lastimosamente, no vengo a hacerle una justa reseña a este cuento, si no a que, juntas, expliquemos porqué no estoy exagerando y mal entendiendo algunos de los libros con los que estoy indignada.

Imaginen algunas de ésas historias, quítenle el contexto, la parte erótica y poco realista hecho en pos de excitar al lector y SOLO vean a la relación en pareja. ¿Hay posesión o amor? ¿Dependencia o acompañamiento? ¿Imposición o libertad? ¿Amor propio o disposición absoluta para el otro? Pueden ustedes decir que, “sí, puede que al principio Caín fuera un poco así, pero ya luego cambia por ella, y por eso es una historia de amor”.

Es justo esa ilusión, que él puede cambiar si ella se esfuerza, y que por eso ella será especial (como nos dice la idea romántica popular en la que se basa esos libros), la que hace quedarse a las mujeres en esa relación y aguantar la violencia.    

 

Quedemos claros: para la psicología, no hay “cura” para los hombres que violentan a sus parejas. Con lo más que se puede trabajar es con la violencia psicológica y física muy leve.

«Cuando lo conocí era perfecto. No era el hombre más guapo del mundo, pero tenía una mirada profunda y una sonrisa traviesa que hacía que me temblaran las piernas.»

Ningún hombre que después va a violar, golpear e intentar matar a su pareja, empezó su relación dándole a ella un puñetazo en la cara. Inicia conquistándola, haciéndola sentir especial. Cambiándola a sus disposiciones para que merezca estar juntos, alejándola de los amigos, la familia, el trabajo y las instituciones para que se centre en él. La aleja de su vida, de su verdadero ser, y se hace a él el centro y regidor de su mundo.

Mi tiempo estaba dedicado a él, y él decía que los amigos en las relaciones solo traían problemas. Creo que sabía lo que decía.

Teníamos pocos problemas. Me sentía orgullosa de saber evitarlos. Era sencillo, simplemente no tenía que hacer lo que le molestaba.

Ya la tiene a su merced. Ha logrado que ceda a sus disposiciones, que sea dependiente de su relación y de él. Y puede subir la intensidad de la violencia sin perderla (Otra realidad: iniciada la violencia, SIEMPRE subirá en intensidad y peligrosidad). Pues ya la hizo aprender que ella será la responsable de satisfacer las necesidades de él y que, “si no lo logra”, es su culpa.

Les presento a “Círculo de la violencia del ofensor”, el mejor amigo para el entendimiento de las relaciones violentas entre parejas:

(Obvien el hecho de hacer sin “h”, por favor)

¿Ven ese lado izquierdo del círculo, en que el “hombre ha cambiado, y todo es amor”? Es la peor de las etapas. Porque es la que “confirma la ilusión de cambio”, y la que hace que el ciclo continúe.  

Y les doy un ejemplo de ello:

«Una vez me tomó de los hombros y me agitó con fuerza. Traté de explicarle que estaba cansada y que no era justo. Cuando lo contradije me dio una cachetada y me dijo que era una descarada.

(…)

Al día siguiente se disculpó. Incluso me trajo margaritas. Estuvo totalmente encantador, era el marido que yo había conocido.»

Spoiler: Las cachetadas siguieron, y luego empezó la violación marital...

Así que, claro que pueden leer lo que les dé la gana, pero siempre recuerden: En una versión de la vida real, el libro solo es el inicio encantador de una relación violenta. Si hubieran secuelas, posiblemente leeríamos como él la mata después de hacerla sufrir un infierno.